Resumen:
Las mujeres que se encuentran privadas de la libertad en centros de tratamiento como los de readaptación social han padecido los efectos de una violencia estructural indirecta y externa que está relacionada con la estructura política y económica en la que figura, por un lado, la represión, originando consecuencias relaciona-
das con la injusticia social, el incremento de la pobreza, limitaciones para las oportunidades del desarrollo, aparición o descontrol de las enfermedades e incluso la muerte; por otro lado, otro tipo de violencia a la que se enfrentan estas mujeres es la exclusión, enmarcada por la separación social al momento de su entrada a prisión, como único recurso al cual se condicionará su situación legal.
Descripción:
Se espera que una vez que las mujeres privadas de la libertad hayan cumplido su condena los centros de tratamiento/readaptación sean capaces de conducirse con base en las reglas de la convivencia social. Sin embargo, ante la gran vulnerabilidad que padecen en esos centros, es posible cuestionar si el sistema penitenciario realmente trabaja por la readaptación social de esas mujeres y les
proporciona las condiciones indispensables para que ellas se reintegren a su familia, para continuar con su educación, para encontrar un empleo digno, para que puedan realizar actividades de ocio con sus hijos que las alejen de la posibilidad de reincidir en el delito por el que fueron castigadas